Un cliente de consumo masivo nos pidió ayuda porque su producto no crecía.
¿Qué pasaba? estaba vendiendo demasiado barato.
Los resultados del estudio: subir $2,000 aumentaba la preferencia del 22% a 26%
¿Por qué? El efecto precio-calidad: cuando un producto es demasiado barato, los compradores dejan de considerarlo porque asumen que es de mala calidad.
En este caso, el precio bajo estaba destruyendo valor: -Menos participación de mercado -Menos ingresos -Menos rentabilidad
Cobrar demasiado poco afecta la rentabilidad, la sostenibilidad, y destruye la marca en el largo plazo.